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Golpea corrupción, salud de los mexicanos

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Escrito por Olimpia Velasco

El “negocio” de las vacunas

Riesgo de que miles de niños y niñas mexicanos se queden sin vacunar: Por falta de abasto, por llegada tardía de las vacunas, por falta de información; por un sistema que facilita prácticas de corrupción, son parte de las conclusiones a las que llegaron en el estudio llamado “Salud Deteriorada, opacidad y negligencia en el sistema público de salud”, y que corresponde a vacunas, uno de los cuatro apartados que lo componen.

Y es que, dice el estudio encabezado por el Doctor Mauricio Hernández Ávila, ex director del Instituto Nacional de Salud Pública y quien ha hecho importantes contribuciones en el ámbito de la salud ambiental, contra el tabaquismo y el cáncer en la mujer, aunque la inmunización es una forma simple y eficaz de proteger y reducir la propagación de enfermedades infecciosas graves, especialmente entre la población infantil, ésta no se aplica con eficiencia que se debe.

Durante la presentación de esta investigación, impulsada por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, el Doctor Mauricio Hernández lamentó que en el país existan mexicanos de primera, segunda y de tercera, pues no toda la población puede acceder a los servicios de salud a los que tiene derecho y, en particular, a las vacunas en edades clave. “Somos un país que vive injusticias, que es inequitativo y en el que no se invierte lo suficiente en salud, sólo 2.8% del PIB.

Entre los principales focos que destaca este estudio, se encuentra la opacidad con la que opera el Programa de Vacunación Universal en México, que facilita prácticas de corrupción y la falta de rendición de cuentas. Y como ejemplo de esto, subraya los abusos de proveedores con prácticas monopólicas, y con precios excesivos, lo que provoca, contrario a lo que dice la ley, “que no se dote al Estado de las mejores condiciones disponibles en cuanto a precio, calidad, financiamiento y oportunidad en la compra de vacunas”.

Por otro lado, se detalló que la Secretaría de Salud, no cuenta con indicadores claros en cuanto a que la vacunación se realice en las edades recomendadas, lo que lleva a que se desconozca el porcentaje real de niños y niñas que han recibido sus vacunas oportunamente, se ignore el riesgo de ello y se carezca de elementos confiables para evaluar la eficiencia del programa de vacunación, que debía llevar a políticas públicas eficaces.

La investigación destaca también que estimaciones tan irregulares, llevan a que datos oficiales arrojen que entre 60.1 y 82.1% de la población infantil ha recibido sus vacunas oportunamente, contrario a datos de Unicef que señalan que solo 34.3 de niños y niñas cuentan con el esquema completo de vacunación o datos del Programa de Cartilla Electrónica de la SS, que reconoce que la cobertura completa en niños y niñas de un año alcanza únicamente 21.9%. También con base en ello se reporta que de 37,353 niños que recibieron la primera dosis de vacuna pentavalente, 22.9% (8,550) no recibieron la tercera y 45% (16,800) no recibieron la cuarta.

Asimismo, datos del Instituto Nacional de Pediatría (INP) advierten que 48.8% de los casos de tosferina que se registran en menores de un año se presentan en niños que no cuentan con el esquema completo de vacunación. Así, los casos de tosferina en México aumentaron de 371 en 2010 a 1,017 en 2015.

En tanto, “la campaña de vacuna contra influenza estacional tiene particularidades especiales. Se trata de una vacuna que debe aplicarse entre octubre y diciembre para lograr una máxima protección durante la época invernal. Detectamos que las condiciones de entrega de la farmacéutica productora no son las mejores para el país, pues la entrega de los biológicos es tardía, lo que disminuye las oportunidades de prevención y acorta los periodos para la misma. Se estima que entre 25 y 42% de las vacunas contra influenza estacional se aplican de manera tardía”.

Además, “hay evidencia de pago de sobreprecios, falta de planeación, desperdicio, desorden e inequidades. Se podría reformar el marco normativo y aprovechar las plataformas disponibles internacionalmente para procurar las mejores condiciones para el Estado en compras consolidadas. Estimamos que si se utilizaran los esquemas de compra que ofrece el Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), solamente para las vacunas contra la hepatitis B, triple y doble viral, BCG, rotavirus y VPH, se podría ahorrar hasta 180 millones de pesos por año”.

Los investigadores subrayaron que los programas de vacunación integrales son piedra angular de la prevención y una de las intervenciones de salud pública más costo-efectivas. “Sin embargo, para lograr sus objetivos, los programas de vacunación universal deben operar bajo un modelo de atención efectivo, que logre aplicar las vacunas en forma cabal y oportuna.

“Con tan solo un poco de voluntad política, se podría encontrar el punto de convergencia entre las más elevadas aspiraciones sociales y nuestra realidad. Conseguir este objetivo es algo que inevitablemente, en un corto a mediano plazo, habría de tener una traducción con impacto positivo en la salud de la población, lo que a su vez significaría mayor calidad de vida, más años de vida y al final del balance, mayor bienestar y progreso para el país”.

Los otros temas que aborda este estudio, se relacionan con atención a la Diabetes, hospitales de alta especialidad y comunicación social.

La investigación completa de Salud Deteriorada se puede revisar en saluddeteriorada.contralacorrupción.mx

Acerca del autor

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Olimpia Velasco

Fue coordinadora editorial en El Universal. Colaboradora en Canal 22, con reportajes especiales. Fundó y dirigió en su primera etapa el portal SuMédico. Fue responsable de contenidos y conductora del programa SuMédico Radio, en el grupo MVS. Directora Ejecutiva de Factor 4, Comunicación. Agencia PR y Prensa.

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