Sexualidad

Qué sabemos sobre el orgasmo y por qué es importante en la vida de las mujeres?

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Escrito por Lupita Avilés

Importante ser consciente y responsable del placer

¿Qué tanto sabemos sobre el orgasmo y por qué se vuelve importante en la vida de las mujeres?  Aquí algunas revelaciones de quienes decidieron hablar con la advertencia de “casi no sé del tema eh”.

“Malen” 50 años
Malen dice: “Si es pregunta de examen, pues déjame decirte que ya reprobé, se ríe y continúa, está complicado, yo en realidad, orgasmos, orgasmos, pues, -hace una pausa y se vuelve a reír-, que haya tenido, mmm son pocos realmente. No soy de las mujeres afortunadas que los tienen a cada rato, yo no, dice. No lo puedo negar si los llegué a tener pero ya no.

“Creo que es algo compartido, que se da entre dos personas y que se llega a lograr.  Yo lo identifico como un cosquilleo tremendo en todo mi cuerpo como una ráfaga de energía que me salía hasta por los dedos de los pies y por el pelo. Se me erizaba todo, de ahí ya no he tenido, me da mucha pena pero ya no, -y se suelta  a reír pero aclara-, más pena por mí verdad, porque eso habla de que no he tenido una vida sexualmente satisfactoria, – y siguió riéndose-.

Y ya en confianza, dice “Malen”, no sé si era mi vagina, mi piso pélvico o el clítoris o “no sé qué maíz”, como que se movía solito, como una especie de contracciones después del acto sexual, no sé si a alguien más le pase pero eso sentía yo.

“Leo” 57 años
Para mí el orgasmo es algo muy hermoso, algo muy bonito que vives con la pareja y cuando estás compenetrada con ella es un éxtasis, es algo hermoso cuando la pareja te sabe llevar, es algo bonito y esplendoroso el terminar después de las caricias que te das, terminas y sientes una paz espiritual muy bonita.

“Magdalena” 45 años
Es como una satisfacción en la parte sexual, eso. Híjole, -y Magdalena empieza a reír muy apenada-, es una satisfacción en lo sexual, nada más, -concluye-.

“Marlen” 22 años
Es un placer que no sé cómo explicarlo, es cómo cosquillas, – se apena y ríe-, sí es como cosquillas en la vagina, se siente como cosquillas. No es como algo que pudieras sentir diariamente, como cuando te hacen cosquillas en las costillas,  no es lo mismo pero se siente rico.

Es muy difícil de describir es como cuando  comes tu comida favorita y te encanta y dices esto lo comería diario, así lo describo.

Algunas veces es muy difícil conseguirlo, sobre todo cuando no estás muy concentrada, y hace mucho que ya no me excito como cuando tenía 18, pero cuando estás muy excitada, es más fácil llegar al orgasmo.

Y aunque “Marlen”, dice que para excitarse su pareja debe saberla tocar, aclara que últimamente “no ha sabido tocarme bien”, y eso hace más difícil que yo me excite por lo que tengo que imaginarme cosas y debo concentrarme porque si estoy divagando me cuesta mucho trabajo llegar al orgasmo pero si me concentro en el momento y en la sensación, es fácil, sí llego.

“Jess” 19 años
Es una sensación que tienes cuando disfrutas o te gusta algo que está pasando, -“Jess” comienza a reír y ya no dice más-.

El orgasmo en el caso del hombre cumple una función reproductiva, así se explica en la biología. En la mujer no tiene este objetivo, es más de tipo placentero, sin embargo, en pleno siglo XXI seguimos con mitos y un autodesconocimiento del propio cuerpo.

En el caso de mujeres muy conservadoras o practicantes de ciertas religiones, el tabú del placer persiste, al igual que el desconocimiento de la anatomía y fisiología del propio cuerpo, así lo explica para SALUD PRIMERO, la doctora y terapeuta sexual Claudia Rampazzo.

Me parece que la mujer mexicana ha evolucionado y –su sexualidad-, no la percibe como un castigo, sino como parte de su salud sexual y un derecho que posee al ser sexuada.  Lo ideal sería que todas las mujeres recibiéramos educación sexual formal y profesional desde pequeñas para conocer nuestro cuerpo, las sensaciones corporales y genitales y aprendiéramos a disfrutar a través de ello. Por otro lado, también valdría la pena que dejáramos de atribuirle al hombre el poder y responsabilidad de “darnos” placer.

Que aprendiéramos que el placer y el orgasmo, es de quien lo trabaja y fomenta, al saber estimular el propio cuerpo.

Y que “el orgasmo es un pico sensorial variable transitorio de intenso placer que crea un estado alterado de la conciencia que inicia con contracciones involuntarias, rítmicas de la musculatura pélvica, es un reflejo de sensaciones desencadenadas. Según estudios, tiene una duración de 0.8 segundos hasta 15 segundos. Esta electricidad que pasa de un hemisferio a otro, nos provoca una alteración del tiempo”, explica la especialista en sexualidad.

Distintos tipos de orgasmos femeninos
Al respecto, la psicoterapeuta sexual Claudia Rampazzo, explica que hay mucho debate sobre cómo clasificar los orgasmos femeninos. Sin embargo, hay poca evidencia para apoyar la idea de que diferentes estímulos de manera confiable (es decir, repetidamente, en condiciones experimentales), causan diferentes tipos de orgasmos femeninos o diferentes intensidades de orgasmos.

La mayoría de las mujeres informa que “algunos orgasmos son mejores que otros “unos orgasmos son más largos que otros”, “unos orgasmos son más intensos que otros”,  pero esto no parece estar necesariamente relacionado con los estímulos que lo causan ni a que las reacciones físicas sean diferentes en cada caso, explica la especialista en sexología.

La estimulación del clítoris es probablemente la forma más fácil para que la mayoría de las mujeres experimenten un orgasmo.

Se podría hablar de muchos tipos de orgasmo en la mujer, -aunque aclara que-, la estimulación del clítoris es probablemente la más fácil para que la mayoría de las mujeres  experimenten tener un orgasmo. Según estudios el 80% de las mujeres alcanzan el orgasmo por estimulación del clítoris y el 20% restante por fricción intravaginal.

¿Por qué fingir un orgasmo?
El pasado domingo 8 de agosto en el marco del Día Internacional del Orgasmo Femenino, la compañía Gleeden difundió una encuesta hecha a más de 15 mil mujeres mexicanas  sobre su experiencia en el orgasmo.

El principal hallazgo para la empresa fue que el 40% de las mujeres encuestadas finge la mitad de las veces un orgasmo con su pareja, y otro 20% solo algunas veces. El  50% de las mujeres explicó que la razón para simularlo es porque su pareja es impaciente y el otro 50% porque deciden terminar rápido el acto sexual debido a que no tienen ganas de tener relaciones, se difundió así en un comunicado de la empresa que administra plataformas de parejas extraconyugales.

Al respecto, la doctora Rampazzo, especialista en medicina sexual, explica a SALUD PRIMERO que la simulación orgásmica femenina puede deberse a situaciones, no todas negativas ni frustrantes:

Aumentar la excitación propia y de la pareja, a complacer a la pareja con un “trofeo” (frecuentemente, la pareja evalúa su desempeño a través de la presencia del orgasmo femenino), desencadenar un orgasmo real,  desencadenar o acelerar el orgasmo masculino, y dar por terminada una relación sexual, tapar la “inseguridad y el miedo” ante la anorgasmia,  son las razones más comunes.

 La mujer mexicana consciente y responsable de su propio placer, es la que puede simular el orgasmo las veces que considere necesario pero que también se conoce lo suficiente como para solicitar el estímulo necesario para alcanzarlo sin simulaciones, aclara la doctora Rampazzo. 

La mejor manera de evitar las simulaciones orgásmicas, es explicarle a la pareja que la exigencia de un orgasmo es un contra sentido: no podemos obligar a nadie a sentirse bien y el orgasmo, como cualquier reflejo, no puede desencadenarse a voluntad de otro y menos solicitarse.

El orgasmo se produce después de un estímulo adecuado y sostenido: el presionar su obtención es contraproducente. La mejor manera de obtenerlo, es sentirnos libres, entregarnos a las sensaciones placenteras que los estímulos que recibimos nos producen y despreocuparnos de cualquier “obligación de sentir”.

El desconocimiento del propio cuerpo, la vergüenza por el placer, los prejuicios, y los estímulos inadecuados pueden causar ausencia de orgasmos. 

Frecuentemente las mujeres tienen dificultades para obtener un orgasmo porque les avergüenza buscarlo por su cuenta con su pareja o platicarlo con el médico.

El orgasmo femenino debería ser visto como la oportunidad para que las mujeres sepan sobre la importancia del placer en ellas  mismas y explorar más sobre su propio cuerpo y sus derechos sexuales.

El autoconocimiento del cuerpo, de la zona genital y de las sensaciones, es el primer paso para el placer sexual en un acto de respeto y placer hacia la misma mujer y que todas las mujeres merecen. Por ello, es importante observar cualquier situación que no parezca normal.

Principales trastornos vaginales, cómo identificarlos y qué hacer para que no afecten el placer sexual de la mujer
La vagina se puede inflamar, infectar, lesionar, desarrollar cáncer y atrofiar. También puede doler al ser penetrada o presentar contractura involuntaria ante la amenaza real o imaginaria de la penetración.

Cada patología tiene signos y síntomas específicos y el diagnóstico lo tiene que realizar un ginecólogo; el tratamiento será diferente para cada caso. Las infecciones, las lesiones, la resequedad y la atrofia vaginal son los problemas más frecuentes en el consultorio del especialista.

Los síntomas más comunes que se llegan a presentar son sensación de sequedad, ardor, comezón en el área vulvar y la vagina; aumento de la frecuencia urinaria en ocasiones con ardor al orinar y sensación de que la vejiga no se vacía completamente; molestia en las relaciones sexuales ya sea con dolor en la penetración o dolor profundo durante el coito.

El 65% de las mujeres que manifiesta los síntomas no acuden con el especialista porque tienden a aguantarse y creer que es normal, y aunque es tratable es evolutivo y progresivo.

La sequedad y/o atrofia vaginal pueden presentarse después del parto, durante la lactancia, por uso de algunos métodos anticonceptivos hormonales y  tratamientos para cáncer.

Las principales molestias se presentan en la zona vulvar y vaginal con sequedad, la vagina pierde elasticidad y humedad haciéndose cada vez más corta y estrecha, generando molestias en la relación sexual, llegando incluso a presentar sangrado.

En el caso específico de la atrofia y resequedad genital, valdría la pena implementar el uso de hidratantes vaginales que contengan ácido hialurónico, vitamina E, liposomas y húmulus lúpulus en diferentes etapas de la vida de la mujer, mucho antes de la menopausia. En el mercado se pueden encontrar una gran variedad de hidratantes con estas características Gynomunal, es uno de ellos.

Regularmente, la mujer oculta los síntomas de sequedad y/o atrofia vaginal por pena o bien lo minimiza o más aún se aguanta las molestias creyendo que luego se le pasará cuando debería platicarlo con el médico para que se diagnostique y pueda ser tratado de forma adecuada.

Acudir a tiempo al médico ayuda prevenir complicaciones además de ahorrar mucho dinero y sufrimiento a las pacientes. Las mujeres deberían sentir el placer de ser libres y disfrutar de su relación sexual, sugirió la doctora Rampazzo.

Acerca del autor

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Lupita Avilés

Periodista egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, incursioné en prensa escrita, medios electrónicos, así como agencias de monitoreo y la docencia. La necesidad de conocer lo desconocido y meterme en terrenos inesperados, como dice el cantante Luis Eduardo Aute, me apasiona. Comunicar lo que aprendo me gusta tanto como descubrirlo. Disfruto ir detrás de la curiosidad y encontrarme con nuevos horizontes.

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