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Una radiografía a la Coca-Cola Cherry

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Escrito por Redacción

Una lata contiene 8.5 cucharadas de azúcares añadidos

Cada lata contiene 6 ingredientes, de los cuales el segundo es jarabe de maíz de alta fructosa

El aumento en el consumo de bebidas azucaradas, incluyendo los refrescos en todos los grupos de edad, está relacionado con el aumento de peso, así como con la presencia de síndrome metabólico (caracterizado por la elevación de glucosa, triglicéridos, colesterol), resistencia a la insulina y otros padecimientos.

Por el contrario, evitar su consumo y sustituirlo por agua simple y/o bebidas no calóricas, ha demostrado prevenir la ganancia de peso.


Azúcares

Una porción de 100 mililitros (ml) contiene 12 gramos (g) de azúcares, lo que equivale a 2 cucharadas cafeteras. Pero es muy común que se consuma el producto en su totalidad (355 ml), el cual contiene 42 g de azúcar, equivalentes a 8 cucharadas y media de azúcar.

Por lo que una lata de 355 ml cubre con el 168% y con el 210%, para adultos y niños, respectivamente, del límite máximo tolerable de azúcares añadidos que se pueden consumir en un día, según lo establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Ingredientes:

Contiene 6 ingredientes, de los cuales el segundo es jarabe de maíz de alta fructosa y el resto son otros aditivos y colorantes.

Ingredientes: Agua carbonatada, jarabe de maíz de alta fructosa, caramelo clase IV, ácido fosfórico, saborizantes naturales, cafeína (34 mg por 355 ml).

Aditivos:

Jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF). Es un aditivo muy usado por la industria debido a su bajo costo y su alto poder edulcorante.

Su consumo, sin embargo, puede contribuir al desarrollo de síndrome metabólico, que es un conjunto de alteraciones metabólicas que incluyen obesidad, aumento en los niveles de triglicéridos, colesterol y glucosa, así como de hipertensión arterial, todos considerados factores de riesgo para desarrollar enfermedad cardiovascular y diabetes.

Colorantes:

Caramelo clase IV. Es un colorante utilizado por la industria de alimentos y bebidas, el cual proporciona tonalidades tales como el amarillo pardo hasta el negro, según su concentración en los productos.

El color se obtiene calentando azúcares a menudo acompañados de amonio o ciertos ácidos y se agrega a los alimentos como el pan y las carnes para dar un color y una apariencia más atractiva, así como a las bebidas.

Sin embargo, diversos estudios han vinculado su uso a efectos carcinógenos. A pesar de que ha sido señalado por organismos internacionales por su gran toxicidad, sigue siendo utilizado para la elaboración de alimentos y bebidas.

Etiquetado:

Este producto es ALTO EN AZÚCAR.

Debido a que es un producto importado el etiquetado no aparece en la parte frontal del empaque, sino en una estampa colocada a un costado de la tabla nutrimental en la parte trasera del producto.

Existe evidencia científica que concluye que este etiquetado denominado GDA no es comprensible y puede resultar engañoso al utilizar valores de referencia mayores que lo recomendado por la OMS para azúcares añadidos.

Finalmente, tampoco se muestran leyendas precautorias que indiquen que “el producto contenido jarabe de maíz de alta fructosa”, “con colorante caramelo IV” ni “contiene cafeína”, lo cual no cumple con la NOM-051 sobre la inclusión de leyendas precautoria que prevengan al consumidor sobre la presencia de ingredientes específicos que pueden dañar la salud.

Valoración:

No se recomienda su consumo habitual, ya que su contenido en azúcares es excesivo, además de que las calorías provenientes de este producto son consideradas “calorías vacías”, pues no aportan ningún tipo de nutriente adicional.

Una mejor opción para mantenerse hidratado es el consumo de agua simple.

Te proponemos:

Además de consumir agua simple para hidratarte, puedes elaborar té o infusiones naturales con extractos de fruta natural o con trozos de fruta, las cuales te aportaran beneficios a la salud. (Información de El Poder del Consumidor)

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