El riesgo cardiovascular y osteoporosis, son los padecimientos más frecuentes durante la menopausia. En la mujer mexicana la etapa del climaterio transcurre de los 35 a 65 años, aproximadamente, y es en esta etapa cuando las mujeres experimentan una serie de cambios fisiológicos que anteceden y siguen a la menopausia, debido a que se presenta una disminución progresiva ovárica, conocida como climaterio.
Durante esta etapa, en la mujer se disminuye la producción de estrógenos, hormona importante en el cuerpo femenino que cumple funciones significativas en el organismo, y que puede causar diversos síntomas, siendo los vasomotres y vaginales los que más experimentan las mujeres en la etapa de la menopausia, además de insomnio, irritabilidad y cambios de humor, así lo señaló el doctor Cuauhtémoc Celis, presidente de la Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia y Ginecología (FEMECOG).
Por su parte, la doctora Imelda Hernández, explicó que en México cada año fallecen más de 34 mil 577 mujeres por enfermedades del corazón, según datos de la Secretaría de Salud, y una de cada tres mujeres mayores de 50 años, sufrirá al menos una fractura osteoporótica a lo largo de su vida, y es durante el climaterio, dijo, que están más expuestas, por lo que se debe de prevenir desde los 30 años con alimentación, suplementación y hábitos saludables, explicó.
“La mayoría de las mujeres no acuden a revisión médica durante el proceso de menopausia porque piensa que sentir “bochornos” es como un castigo divino que deben de tolerar y que pronto pasará”.
Agregó que en el Sector Salud la menopausia no está catalogada como enfermedad, sin embargo, aclaró que “no existe educación médica para considerar este proceso como una oportunidad de oro para prevenir otras enfermedades y detectar factores de riesgo en la mujer, -y enfatizó-, que la revisión médica, “no es para dar tratamiento hormonal porque ese no es el objetivo de la consulta”, aclaró.
Agregó, que se necesita información para sensibilizar tanto a médicos como a pacientes para prevenir y encontrar enfermedades que pueden ser tratadas y no necesariamente para dar tratamiento hormonal. Se trata dijo, de “hacer un diagnóstico, generar medicina preventiva, y en aquella mujer que tenga una indicación, iniciar una terapia hormonal, tratamiento, que dijo, no es eterno como muchas pacientes consideran.
Explicó que entre las complicaciones más frecuentes por el déficit estrogénico, es el “bochorno”, el síndrome genitourinario, la probabilidad de osteoporosis, además del riesgo cardiovascular e hígado graso, que pueden generar una enfermedad crónica y muerte temprana en una mujer.
La doctora Hernández Marín, informó que después de los 50 años, 12 de cada 20 mujeres padecen osteoporosis y solo 7 de cada 20 hombres van a tener osteoporosis, subrayó que esta diferencia está marcada por la menopausia y por el déficit estrogénico.
“Es una puerta del tiempo que abre la posibilidad para que la mujer empiece a cursar distintas comorbilidades que van a comprometer su salud a largo plazo”, consideró la especialista en ginecología endócrina.
En la menopausia, se acelera la osteoporosis, la hipertensión, el riesgo cardiovascular y resequedad vaginal, y aunque no hay una edad específica para un tratamiento hormonal que puede ayudar a disminuir síntomas dependiendo la evaluación de cad apaciente, nunca debe ser administrado en mujeres de más de 60 años y que no hayan recibido una terapia hormonal.
Los especialistas coincidieron en que el tratamiento hormonal estrogénico puede ayudar a aliviar los síntomas y proteger contra las enfermedades propias de esta etapa a las mujeres, previa evaluación del paciente y de acuerdo a sus necesidades podría ser una terapia oral, transdérmica o inyectable.
Criterios de contraindicación
Mastografía con calificación inapropiada
Mujeres fumadoras
Diagnóstico de hipertensión
Mujeres con diabetes
Que presenten migraña
La terapia hormonal no es para siempre
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